Muchas veces vamos dando por hecho,
hechos que… “al volver la vista atrás”,
vemos de modo desigual.
Para mi
“generación”… de años atrás y algo en posterioridad, puede que en el acerbo
“cultural” inconsciente, mantengamos un sinónimo latente… entender por “Buena Educación” (entiéndase
idéntica a “educación de CALIDAD”) aquella que se prodigaba por instituciones
religiosas, privadas siempre, y con ese tufo de religión y patria, comulgados
en aquellos años del “nacional catolicismo”… difícil de entender ahora pero
asfixiante en aquellos días en que la mentalidad de cuartel militar se extendía
por todo el “estado”.
Este sustrato flota
aún en el ambiente, de quienes ahora –antes educados en-por aquellos patrones– añoran/juzgan/comparan
aquellos modelos con los advenidos. Siempre impregnados del vaho de “familias y
castas”. Y cual escalafón de rangos también se jerarquizaba la misma sociedad,
por ser mejor o peor “familia”, pues no contaba el individuo, sino el clan
familiar con el pater familia cual “cabo de escuadra”.
Todas las “buenas
familias estudiaban en colegios religiosos, si en internados mejor, y ante tal
demanda tales instituciones confesionales, se esforzaban por abrir nuevos colegios
y ampliar su oferta, que por convenios estatales se nutrían de “ayudas”. Dentro
de este enjambre había “categorías de calidad”, de primer, segundo, incluso
tercer orden –siempre la jerarquía-. Con “Alumnos de Pago”, con más derechos
que los “alumnos de misericordia”, por supuesto.
Habían también
puertas para unos y para otros, incluso uniformes que les distinguieran, para unas
actividades juntos para otras, segregados. En este caldo ambiental, que los
niños anduvieran separados de las niñas era lo de menos… pero como las cosas
eran así… así eran las cosas. Educación y posición económica del pater familia
iban de la mano. Incluso se llegaba a más, pues entre los pobres también había “postín”
y categorías… si del barrio tal, del oficio, si huérfano, si…
Así era mi educación
de entonces… una escatología celestial reproducida a nivel terrenal.
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