sábado, 15 de marzo de 2014

Día del Padre y Educación - Educación y Día del Padre


¡Mira por dónde! Que pensando en el “día del padre” me llevan los aires hacia los escollos educativos. ¡Y todo! porque al pensar en paternidad, así, en “asociación libre de ideas”, elaboro esos “constructos” de referencias, criterios y valores, actitudes,… sí…, y luego, las competencias…

Como “paters” se nos presentan las figuras “de autoridad”… Muchos problemas de “fracaso escolar”, no estriban en la “inteligencia”, sino en el proceso de la “obediencia”… porque la obediencia y la inteligencia van de la mano, nada lo uno sin lo otro… quien no obedece a su madre-padre/padre-madre, no se obedece a sí mismo, y si no se obedece a sí mismo, no logran poner orden en sus vidas (la obediencia es orden en el desorden, todo en la existencia mantiene procesos, procesos que hay que saber resolver con justicia… porque sí al final la vida te lleva a elegir, y la elección, la libertad, se nutre de la deontología , y estas de la axiología y de la taxonomía. Y así empezando por la educación termino en la filosofía)

La obediencia es una actitud, pero claro, como el veneno, todo en su justa medida; puedo obtener inmunidad o la propia extinción/eliminación.

En la educación debiéramos “dominar” ese “axioma mayéutico” de dejar que las cosas fluyan. a veces por correr, precipitamos procesos –en esquemas “productivos industriales”…- actuando precipitadamente, nos precipitamos EN NUESTROS PROPIOS PRECIPICIOS. ¿Cómo hacer que las cosas no se hagan?, que lo que tiene que ser no sea…


Un barco es nuestra vida,
en el mar de la existencia.
Surcar las aguas a nado o
navegar son opciones,
pero el mar, siempre el mar,
presente y sin acabar.

Cuando un día vine a nacer, a
cual barco mi vida comparé, y
cual botadura a ella me lancé.

Padre, querido padre, tutor,
sostén, apoyo y referente,
siempre en tí, en tu vida encontraré.

Un barco es nuestra vida,
en el mar de la existencia.
Surcar las aguas a nado o
navegar son opciones,
pero el mar, siempre el mar,
presente y sin acabar.

Rafael Parejo Herrera

domingo, 9 de marzo de 2014

El sentido e identidad de la DEMOCRACIA


SUSTENTOS DEL PODER
¿POR QUÉ ESTE ENTRAMADO DE RELIGIÓN Y PODER?
sobretodo en el "concubinato de conservadores y eclesiásticos"

La verdadera esencia, sentido e identidad de la DEMOCRACIA radica en la premisa y consideración, que cada hombre-mujer, es libre, independiente y soberano para gestionar-gestar sus decisiones. Nadie es más que el otro, y por tanto, las tomas de decisiones democráticas SON ENCOMIENDAS hechas a diputados-delegados-representantes DE LAS QUE DEBEN DARnos CUENTAS.

Es incongruente para la propia Democracia que exista “iguales” y desiguales. Cuando las mayorías aplastan a las minorías, ya se rompe el sentido mismo de la democracia… puesto que EN DEMOCRACIA se trata de tejer “consensos” que a todos convenga Y CUAL HERENCIA, NINGUNO SALGA MALPARADO. Una democracia que se impone a unos cuantos “en base a la mayoría” es desquite… algo así como abuso del mayor sobre el menor. [Y LO QUE ES EXCEPCIÓN, SE HA HECHO REGLA].

Yo, que antes de ser cura, fui fraile, y antes que sacristán, monaguillo, así como antes que rey, plebeyo, viendo como con los años, cual rayos Röntgen, busco palpar lo que detrás de las apariencias se esconde… Y así, observando a esos que desde “su cielo” nos pisotean, les respondo: "un dios que genera preferencias entre sus propios hijos, no es ni dios ni padre". Propio es de los hijos, crear diferencias, pero no cabe en el propio padre, y si como padre pudiera, como Dios, ¡nunca! Y SI EL MISMO DIOS NOS HICIERA IGUALES ¿A QUÉ ESTA DESIGUALDAD TRAICIONERA?

Dios, es esa autoridad máxima que determinados hombres en el poder, impone a los demás para “legitimizar” las “normas llamadas leyes”, que al gobernante conviene y cuya aplicación manipula a su conveniencia.

¡Claro! que el poderoso se ha basado en esa energía cósmica “plural” que fluye en toda la existencia… por esta razón hay tantos dioses; porque en cada momento, el grupo dominante ha utilizado a esas “manifestaciones y plasmaciones” (antes se fundaban religiones, del Renacimiento para acá “iglesias”)

Pero no quiero confundir… está “La Energía”, y está esa imagen de Dios que nos creamos y creemos. Pasa como con el lenguaje, según las palabras, así los conceptos con los que pensamos. Como el pensamiento es fluido, hemos de organizar el discurso, pero éste va a determinar su función y aplicación pragmática… (…en el principio era el verbo y el verbo era dios… y en su dinamismo… se hizo carne, y habitó entre nosotros… -del “Evangelio” de Juan-)

Y volvamos a la esencia del poder, la autoridad, ésta nace y viste a la persona que es capaz de guiar a buen puerto la nave. Pero la nave va con su tripulación, a la que sabe mandar-gobernar y les protege y les cuida. De este modo, su tripulación y su mando son una sola cosa. En esta sociedad cada uno hace una cosa. Que cada uno haga lo que sabe hacer bien, y así lo haga, y de ello responda. Tan importante es gobernar, como curar, enseñar o construir casas o puentes… Si establecemos “castas” ya estamos destrozando la misma democracia, nadie es más que otro.

[¿Si hemos tenido reyes-tontos, por qué no tontos-reyes…?]


¡Ya veis, religión y democracia no pueden ir de la mano!... aunque en los Estados Unidos de América se agarraran a él  para deificar la convicción de “diversos y unidos”, que como slogan queda bien. Sólo como slogan.