Me he encontrado con este curioso, interesante e inteligente discurso sobre el hecho del proceso educativo. En su misma onda, pensamiento divergente, y también de las inteligencias múltiples podemos seguir reflexionando, no por "pensar" sino por reorientar nuestra consideranción-actuación de la persona, de cada persona en la situación de aprender los contenidos que el sistema les propone, al margen de los intereses que le motivaran.
no dejéis de auditar este discurso (http://www.youtube.com/watch?v=AZ3JmuaUrxs&feature=em-subs_digest-vrecs)
El pedagogo tiene que saber "andar" en ese "ecosistema" de emociones, aspiraciones y frustraciones en sujetos, no objetos, que tienen ideas, explicaciones... aunque sean "cortas" e inmediatas.
El otro día le planteaba la explicación "etimológica" del concepto EDUCACIÓN. Educación como CONDUCCIÓN, y sí los conocimientos son necesarios para ser, por supuesto, aplicados a la educación como conducción del sujeto en su-nuestro entorno. Hemos de saber desenvolvernos en las distintas situaciones. Los conocimientos son necesarios PERO HEMOS DE SABER "COLOCARLOS" en los "barcos" porque mal colocados, desequilibrados, escoran, desequilibran y vuelcan... y al carajo "el barco y la mercancía". No se trata de lanzarlos al mar sino de guiarlos a buen puerto.
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